Las joyas de Armak están extremadamente bien elaboradas y, si se cuidan adecuadamente, se pueden disfrutar durante generaciones. Los contaminantes del aire, el polvo, la transpiración, los perfumes, las cremas y otros elementos naturales pueden opacar la apariencia de las piedras preciosas o los metales preciosos. Debido a esto, siempre es una buena práctica limpiar sus joyas con un paño de algodón después de usarlas. Además, las joyas deben limpiarse e inspeccionarse profesionalmente una vez al año. Al igual que un buen automóvil, la inspección y el mantenimiento periódicos de las joyas ayudan a evitar reparaciones o reemplazos costosos. Inspeccione personalmente sus joyas mientras las usa buscando piedras sueltas o astilladas, eslabones gastados, puntas dobladas o cierres que no funcionen correctamente.